En cualquier circunstancia, las empresas necesitan mantener un mínimo de efectivo para financiar o realizar sus actividades diarias. Los financiamientos a través de inversiones sirven para seguir creciendo. Sea para abrir una nueva sucursal, adquirir nueva maquinaria, desarrollar un nuevo producto, crear la infraestructura para ofrecer un nuevo servicio o resolver un inconveniente de liquidez, los empresarios pequeños, medianos y grandes pueden ayudarse a alcanzar sus metas recurriendo al mercado de valores.
A diferencia del financiamiento tradicional a través de la banca, con un costo que para muchas empresas puede resultar excesivo, al mercado de valores puede acceder cualquier empresa si cumple ciertos requisitos. En retorno, la
empresa obtiene alternativas diseñadas a la medida de sus necesidades y obtiene la fluidez directamente de sus inversionistas.
En el mercado de valores están los intermediarios de valores como los puestos de bolsa, entidades que brindan una serie de servicios y herramientas necesarias para ejecutar las necesidades de inversión y/o financiamiento de sus clientes y el resto de los participantes.
El financiamiento a través del mercado de valores permite a la empresa buscar la forma óptima de lograr levantar ese dinero para consolidar y fortalecer su estructura financiera, generando las condiciones necesarias de competitividad y facilitando el aprovechamiento de las oportunidades de negocios que se le presenten.