Adicionalmente, el crecimiento interanual de 4.3 % del valor agregado de la manufactura local estuvo impulsado por las industrias de elaboración de bebidas (9.6 %), productos químicos (9.2 %) y aceites y grasas (6.9 %).
En otro orden, el sector agropecuario registró un crecimiento promedio de 2.9 % en enero-julio, exhibiendo una tendencia a la mejoría en los últimos dos meses. Vale puntualizar que en el desempeño de este sector han incidido las medidas oportunas implementadas por el Gobierno del presidente Luis Abinader, a través del Ministerio de Agricultura y sus dependencias, con el interés de brindar apoyo técnico y financiero a los productores agropecuarios a nivel nacional.
Cabe destacar que, el desempeño del crédito al sector privado en moneda nacional contribuyó al resultado del IMAE, registrando un crecimiento de 13.9 % en términos interanuales al cierre de julio de 2022. Este dinamismo en los préstamos al sector privado en moneda nacional está impulsado principalmente por el financiamiento al sector agropecuario, microempresas, consumo, adquisición de viviendas y construcción. Al incluir los recursos canalizados en moneda extranjera, los préstamos privados totales crecieron 15.1 % en dicho periodo.
Si bien es cierto que el crédito aún muestra un comportamiento dinámico, las tasas de interés han estado aumentando en respuesta a las medidas de retiro gradual y ordenado del estímulo monetario del Banco Central de la República Dominicana para combatir la inflación y evitar el sobrecalentamiento de la economía, tal y como lo han hecho la mayoría de los bancos centrales a nivel mundial. En ese sentido se observa que al cierre de julio de 2022 la tasa de interés pasiva (anual) promedio ponderado de la banca múltiple se posicionó en 8.1 %, mientras que la tasa de interés activa (anual) promedio ponderado se ubicó en 11.8 %, situándose el promedio de lo que ha transcurrido en el mes de agosto por encima de 12 %, aún por debajo del nivel que existía previo a la pandemia. Es importante resaltar que las tasas de interés de mercado no registran niveles superiores por el efecto de los recursos aún vigentes ascendentes a RD$125,000 millones de los RD$215,000 millones facilitados por la autoridad monetaria durante la pandemia, los cuales fueron colocados por los intermediarios financieros a tasas fijas de hasta 8 % por un período de 3-4 años.

Vale la pena mencionar, que las tasas de interés de los préstamos orientados a algunos sectores como el hipotecario y el de consumo han registrado mayores incrementos que otros renglones, sin embargo, el crédito canalizado a estas actividades aún mantiene un dinamismo importante.
En otro orden, el sector externo continúa mostrando un desempeño favorable al mes de julio de 2022. Dentro de estas variables se destacan las exportaciones, las cuales registraron un valor de US$1,186.7 millones en el mes de julio de 2022, para un aumento interanual de US$131.0 millones (12.4 %). De manera acumulada, entre enero y julio las exportaciones ascendieron a US$8,199.2 millones, mostrando un crecimiento de US$1,122.4 millones (15.9 %). Las exportaciones nacionales se situaron en US$3,596.8 millones, mostrando un aumento de US$599.5 millones (20.0 %), mientras que las exportaciones de zonas francas alcanzaron unos US$4,602.4 millones, con una variación interanual de 12.8 %.

En ese sentido, la evolución positiva de las actividades generadoras de divisas, incluyendo la entrada de remesas por US$5,669.7 millones en enero-julio de 2022, favoreció la estabilidad relativa del tipo de cambio, reflejada en una apreciación acumulada de la moneda local de 5.3 % al cierre de julio y que ha superado el 7 % hasta la última fecha disponible de agosto, tanto en términos acumulados como interanuales. Asimismo, se fortalecieron las reservas internacionales hasta ubicarse por encima de US$14,000 millones, equivalentes a cerca de 13.0 % del PIB y 5.9 meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI.

Finalmente, como se puede apreciar el resultado de la economía en el periodo enero-julio es una muestra fehaciente de los fuertes fundamentos macroeconómicos de la economía dominicana y de que el país avanza en la senda correcta, aún en el contexto de la desafiante coyuntura internacional.