República Dominicana continúa recogiendo “buenos” pronósticos de crecimiento de su producto interno bruto (PIB). Luego de las proyecciones del Banco Mundial, Oxford Economics y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), ahora el Fondo Monetario Internacional (FMI) se suma con perspectivas de crecimiento de 4.3% en el 2023 y 5.0% en 2024.
Las estimaciones para el país caribeño se dan en medio de lo que catalogaron como una desaceleración y alta inflación en medio de tensiones sociales para América Latina. Para el organismo internacional, las economías de la región se mantuvieron “bien” el año pasado a pesar de los impactos de la invasión rusa de Ucrania y las alzas de las tasas de interés a nivel mundial.
Debido a estas últimas, y la caída de los precios de las materias primas, el FMI advierte que el desarrollo durante el 2023 está a punto de disminuir a solo un 2%. “Es probable que 2023 sea un año desafiante para la región”, afirman.
Agregan también que la economía se verá frenada por la desaceleración de los socios comerciales, en particular Estados Unidos y la zona del euro. Eso en momentos en que la creación de empleo y el gasto de los consumidores tanto en bienes como servicios se están desacelerando, y la confianza se está debilitando.